MADRID, ESPAÑA — El corazón de todo un país late con tristeza tras conocerse la desgarradora historia de Magma, un perro mestizo que fue abandonado en las frías calles de Madrid y que sobrevivió durante meses entre el hambre, las heridas y la indiferencia de la gente.
Vecinos de la zona cuentan que Magma merodeaba cerca de una vieja estación de autobuses, con el pelaje enmarañado y lleno de polvo, pero con unos ojos brillantes que parecían suplicar ayuda. “Jamás olvidaré esa mirada. Era como si rogara por una segunda oportunidad”, relata con lágrimas en los ojos Carmen López, florista del barrio.
La organización de rescate animal Patas de Corazón reveló que Magma había pertenecido a una familia de las afueras de la ciudad. Cuando se mudaron, simplemente lo dejaron atrás. Sin techo ni comida, el perro sobrevivió gracias a los restos de comida de restaurantes cercanos y al agua de los charcos tras la lluvia.
Su historia habría permanecido en el anonimato si no fuera por un niño de 9 años que lo grabó temblando bajo la lluvia y compartió el video en redes sociales. La grabación se volvió viral en cuestión de horas y despertó indignación y compasión entre miles de internautas.
Cuando los voluntarios finalmente lo encontraron, Magma estaba extremadamente delgado y con una herida grave en la pata trasera. Los veterinarios advirtieron que necesitaría varias semanas de cuidados intensivos. Aun así, lo más sorprendente fue que, pese al abandono y el dolor, el perro movía la cola y trataba de ponerse de pie para saludar a sus rescatistas.
“Es un verdadero luchador. Después de todo lo que ha vivido, todavía confía en los humanos”, comentó emocionada Laura Fernández, una de las voluntarias.
Tras hacerse pública la noticia, nació la campaña “Hope for Magma” y en solo 48 horas recaudó más de 20.000 euros para cubrir su tratamiento médico y garantizarle un futuro digno. Decenas de familias de toda Europa ya han ofrecido un nuevo hogar para él cuando esté recuperado.
La historia de “Abandonado a Sufrir en Silencio” no solo ha conmovido a España, sino que se ha convertido en un símbolo de esperanza y solidaridad. Magma ya no está solo: su valentía y su espíritu inquebrantable han inspirado a miles de personas a no mirar hacia otro lado ante el sufrimiento animal.